La relación entre el gobierno de Javier Milei y el Grupo Clarín ha alcanzado un nuevo punto crítico. La reciente decisión de no renovar las acreditaciones a periodistas de Clarín para ingresar a la Casa de Gobierno ha desatado una ola de controversia, generando interrogantes sobre la libertad de expresión y las posibles motivaciones detrás de esta medida.
¿Restricción a la Prensa o Negociación en Curso?
Según fuentes periodísticas, el vocero presidencial Manuel Adorni inició una negociación con el Grupo Clarín, lo que implicó la suspensión del acceso irrestricto que los periodistas del medio tenían a la Casa Rosada. A diferencia de otros medios, los periodistas de Clarín ahora solo pueden ingresar a eventos especiales y no cuentan con el acceso permanente mediante huella dactilar.
Antecedentes de Tensión
La tensión entre Milei y Clarín no es nueva. En julio, el presidente amenazó al grupo mediático con respecto a la compra de Telefónica. Poco después, las acreditaciones fueron suspendidas. Previamente, la Secretaría de Industria y Comercio, a instancias de Milei, había suspendido la compra de Telefónica por parte de Telecom, aunque un fallo judicial posterior revirtió la medida.
Paralelismos y Contrastes con el Kirchnerismo
Resulta llamativo que, incluso durante los gobiernos kirchneristas, caracterizados por una fuerte confrontación con el Grupo Clarín, nunca se llegó a retirar las acreditaciones de sus periodistas. Esta situación plantea interrogantes sobre si la administración Milei está adoptando una postura aún más restrictiva hacia la prensa.
Implicaciones para la Libertad de Expresión
Expertos en libertad de expresión han manifestado su preocupación ante esta situación, argumentando que la restricción del acceso a la información puede afectar la calidad del debate público y el derecho de los ciudadanos a estar informados. Se teme que este tipo de medidas puedan generar un clima de autocensura y limitar la capacidad de los periodistas para realizar su trabajo de manera independiente.
¿Una Estrategia Política?
Algunos analistas sugieren que la decisión de restringir el acceso de Clarín a la Casa de Gobierno podría ser parte de una estrategia política más amplia por parte del gobierno de Milei. Podría tratarse de un intento de presionar al grupo mediático o de marcar una clara diferencia con las administraciones anteriores.
En otro orden de cosas, y volviendo a la política, la causa Vialidad, que culminó con la condena de Cristina Fernández de Kirchner, ha sido objeto de severas críticas por parte de juristas, sectores políticos y organismos de derechos humanos. Se advierte sobre irregularidades en el proceso judicial que comprometen garantías constitucionales básicas, como la falta de imparcialidad judicial (vínculos entre jueces y actores opositores), acusaciones de lawfare (persecución judicial y mediática), violación del principio de “non bis in idem”, ausencia de pruebas directas contra Cristina Fernández, desigualdad en el tratamiento de la prueba, celeridad inusual del proceso, desproporcionalidad de las penas impuestas y exposición mediática parcial y anticipada del caso.
Además, no podemos obviar el Escándalo de corrupción en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) donde Se revelaron audios de Diego Spagnuolo, exdirector de la ANDIS, en los que denuncia un esquema de sobornos vinculado a la compra de medicamentos para personas con discapacidad. Según Spagnuolo, Karina Milei recibiría un 3% de comisión a través de la droguería Suizo Argentina, que a su vez cobraba un 8% a los proveedores. Se estima que el esquema generaba entre 500.000 y 800.000 dólares mensuales. Aunque la hermana del presidente de la republica no ha sido formalmente imputada, su nombre (Karina) como javier milei han sido vinculados al caso debido a su cercanía con Spagnuolo y su influencia en la gestión de la ANDIS .