El Manchester City ha tenido un comienzo prometedor en el mercado de fichajes, pero aún enfrenta desafíos para concretar todas sus aspiraciones. Con cuatro nuevos fichajes y la posible incorporación de un quinto, además de la llegada de nuevos entrenadores para asistir a Pep Guardiola, la directiva citizen ha generado entusiasmo entre sus seguidores e incluso el reconocimiento de sus rivales por el valor estratégico de sus movimientos.
Tras asegurar la mayor parte de sus incorporaciones, el enfoque principal ahora se centra en equilibrar la plantilla mediante salidas. Guardiola ha llevado a 27 jugadores a los Estados Unidos, un número mayor al que prefiere manejar habitualmente.
Sin embargo, esta lista excluye a figuras prominentes como Jack Grealish y Kyle Walker, quienes quedaron fuera para resolver sus posibles salidas del Etihad Stadium. Al parecer, ambos jugadores no forman parte de los planes del club para la próxima temporada, lo que hizo innecesario su viaje al Mundial de Clubes.
Esta decisión estratégica, si bien busca optimizar la gestión de la plantilla, podría complicar las negociaciones. Enviar un mensaje claro de que estos jugadores son prescindibles debilita la posición del City en las negociaciones. A diferencia de las compras, donde los clubes están dispuestos a pagar primas por estrellas en su mejor momento, Walker y Grealish no se encuentran en esa categoría actualmente.
Ambos jugadores buscan demostrar que aún tienen la capacidad de rendir al máximo nivel, tras haber disfrutado de contratos lucrativos cuyo rendimiento posterior no estuvo a la altura. El desafío ahora es encontrar un destino donde puedan revitalizar sus carreras y volver a brillar.