Boca Juniors debutó en el Mundial de Clubes 2025 con un empate 2-2 frente al Benfica, un partido que dejó sensaciones encontradas en la afición xeneize. Sin embargo, más allá del resultado, un detalle sutil en la indumentaria de algunos jugadores no pasó desapercibido para los observadores más atentos: un gesto “anti-River” que refleja la intensa rivalidad entre ambos clubes.
El particular detalle en los botines
Carlos Palacios, Kevin Zenón y Milton Giménez, este último ingresado durante el partido, saltaron al campo de juego luciendo botines blancos con una franja roja que había sido cuidadosamente cubierta. Los colores, inevitablemente asociados a River Plate, fueron ocultados con pintura o marcadores negros, una modificación que no pareció casual.
Este gesto, aparentemente menor, cobra relevancia en el contexto de la fuerte rivalidad entre Boca y River. La utilería del club, encargada de preparar la indumentaria de los jugadores, podría haber recibido la instrucción de eliminar cualquier elemento que pudiera vincularse con el eterno rival.
¿Una estrategia institucional?
El hecho de que el detalle se repitiera en los botines de tres jugadores diferentes sugiere que podría tratarse de una medida adoptada a nivel institucional. Esta acción se suma a otras estrategias, como la decisión de River Plate de no utilizar la camiseta número 12 en referencia a la hinchada de Boca.
Más allá de la anécdota, este curioso detalle refleja la pasión y el compromiso de los jugadores de Boca con sus colores, incluso en los detalles más pequeños. El Mundial de Clubes es una vitrina global, y cada gesto cuenta para reafirmar la identidad del club.
Boca busca la clasificación
Tras el empate ante Benfica, Boca se prepara para enfrentar al Bayern Múnich en su próximo partido del Mundial de Clubes. El equipo necesita obtener un buen resultado para mantener vivas sus esperanzas de clasificar a los octavos de final. La competencia es dura, pero el equipo buscará dejar todo en la cancha para representar con orgullo a sus hinchas.